lunes, 11 de junio de 2012

Frenos

No se sus ambiciones, no conozco sus sueños, nuestra historia no existe y tal vez jamas valla a hacerlo, solo hay fragmentos regados por el suelo, un par de trozos flotando en el tiempo, unidos por letras invisibles, por miradas encarnadas sin quererlo, por bocetos borrosos sumergidos en hielo. Tan lejano en su orgullo, tan esperando en el tiempo, par de enfermos lisiados de emociones, tanto fuego en tan pocos cuerpos, tanta atracción frenada por el razonamiento. Se llaman con textos secretos, de los que nadie sabe nada, si siquiera ellos. El frágil enfundado en el papel del villano, la descorazonada fingiendo sentimientos, ambos esperando en la estación del tiempo sin mirarse pero sintiendo el instinto animal que los quema por dentro, luchando contra sus cascarones que les impiden rodar por el suelo.
No puedo evitar comerte con las manos en la oscuridad, bajo la mesa o a media ciudad, en el auto o frente a tu mamá. No paro y no quiero hacerlo, la miel de tus labios mi dulce veneno. Tomo tus manos, toco el cielo, me recargo en tu pecho y me hundo en el suelo. Me elevas como el helio, me quemas como el fuego, me vuelves el más inestable elemento. Como el dios que en la enunciación crea en lo que digas me convierto, la niña mimada, el lobo del cuento, la creyente aferrada, la puta del centro. Con las medias jaladas o el suéter al cuello, con la ropa de marca o mis botas de viejo. Voy saltando a tu lado, voy atada a tu pelo, rebelde enmascarado, ojos de sueño, viejo huraño, satán de cuento. Inestabilidad tu segundo nombre, prevalencia mi argumento, el ancla de papeles siempre mas complejos. Parados en la nada sobre delgados trozos de hielo retándonos para ver quien muere primero, te muerdo los labios, me jalas el pelo, te araño la espalda, caemos al suelo, rodamos a grito de silencio besamos otras caras, otros sueños, esperando encontrar los dobles en estos espejos.

Telar

Nublando mi mente, ardiendo mis ojos, asaltando el sueño que otras veces me asfixiara. Te comes mi agrio cerebro con negaciones absurdas, has intentado frenar mi paso constante con obscuridad. Me muestras sin darte cuenta tu fragilidad, estas jugando en la tela sin saber que soy la araña que te mira y se doblega mientras te engaña.

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Noche loba, noche boca...

Solo te crujen los huesos y rechinas como loca te barre la injusticia y los cráneos tocas. Noche lobo exhala tu inmundicia en mi boca empaña estos ojos que te robaran hasta la ultima gota. Bebedora de malicia calzada en botas del brillo de tu arco escurren rojas gotas. Tu saliva, tu ponzoña mis papilas amargas reclaman tu boca de bar oscuro de tristes notas de alas que no vuelan de ojos que no tocan de venenos podridos que llenan tu copa. Delirante mi lengua te roza subiendo por tu espalda pecaminosa lamo tus heridas supurosas Noche loca, noche cosa envuelve me en tu parpados de marchita rosa llévame a tu mente donde la maldad reposa úsame de abrigo úsame de bolsa has lo que quieras conmigo hoy mi voluntad esta rota.

jueves, 6 de octubre de 2011

Mi mar guerra

Demasiado pequeña para ser un huracán, pero casi tan alborotadora como uno.

Con la calma como bandera, es mi mar que me engulle sin pensarlo siquiera, me atrapa en sus olas traviesas, me revuelca.

Me calma con su susurro permanente, me ahoga y me renueva.

Se pone en furia y se levanta cual coloso en guerra, con grito en garganta y ojos de hiena.

Me azota me lleva.

Mujer niña, mujer fiera.